27/28 de Febrero-1
de Marzo - Italia: Roma - Primer congreso del PR.
27/28 de Febrero-1 de Marzo - Italia: Roma - Primer congreso del PR.
Ya en el primer congreso, se dibujan los límites del partido. Tres años después de su creación, no ha conseguida dotarse de estructuras modernas y promover iniciativas políticas diferentes a las de los círculos radicales emparentados con "l'Espresso" y con las reuniones de "Amici del Mondo".
Tras tres años de ausencia de debate interno, Marco PANNELLA requiere a todos los congresistas a que se pronuncien con toda sinceridad y sostiene que la mayor parte de las razones por las que el PR había sido recibido como "un nuevo partido para una política nueva", han dejado de ser válidas y cita en particular la ausencia de estructuras adecuadas que permitiesen reunir, organizar o permitir la autoorganización de los jóvenes que depositen su confianza en el partido. Los estatutos son inadecuados y obsoletos, el "comité de estudios" que debía dar impulso al partido no se había formado, la temática federalista se había descuidado mientras los nacionalismos europeos se reforzaban peligrosamente. Se había dejado de hablar de la denuncia del Concordato. Además, cosa importante, el Partido no disponía de una clase dirigente que asegurase su gestión, en especial en lo referido a la labor cotidiana, para invitar a las fuerzas locales a localizar razones y recursos, especialmente financieros, necesarios para su actividad, antes que continuar recabándolos de los organos centrales que les sostienen. (AP 3482)
Además, el Partido Radical no ha obtenido los resultados esperados en las pasadas elecciones, las del 25 de Mayo de 1958, que vieron cómo la laianza radical-republicana alcanzaba el 1,4% de votos, mientras que el PRI obtuvo en solitario el 1,6% en las elecciones del 53. Además, de los 6 diputados electos, ninguno es radical. En el curso del mismo período, la crisis del gobierno de Amintore FANFANI prepara la alianza con la derecha que conducirá al gobierno TAMBRONI.
En este contexto político, el informe del Comité Ejecutivo Nacional (aprobado por el primer congreso nacional), confirma por una parte, el rechazo a los gobiernos de coalición con la DC (democracia cristiana) y, por la otra, la propuesta de apertura a la izquierda de los socialistas. De hecho, el congreso confirma la propuesta de una alianza de la izquierda democrática que pueda presentarse como alternativa a la Democracia Cristiana y al Partido Comunista.
Organos electos
Secretaría: Leopoldo PICCARDI, Arrigo OLIVETTI, Franco LIBONATI
Vicesecretario: Eugenio SCALFARI
"Il Paese" publica un artículo de Marco PANNELLA titulado 'La lógica aplastante de la 3ª Internacional". Pannella, dirigiéndose a la clase dirigente comunista, plantea una cuestión central de la historia política italiana: "Si para fundar en Italia un Estado democrático y moderno, como prevé la Constitución, se precisa una nueva mayoría en el país y en el parlamento, ¿porqué no llevar a la práctica la posibilidad de una acción común de la izqiuerda democrática junto con parte de los católicos y de los comunistas??." Pannella critica vivamente la conducta del partido comunista a lo largo de su historia. Con todo, invita a los comunistas a mostar "un interés concreto y espontáneo a favor de una alternativa gubernamental democrática y a abstenerse de proponer políticas faltas de realismo que no podrían poner en práctica incluso si pudiesen gobernar en solitario. Igualmente les invitamos a abrirse a Europa, reconociendo las nuevas referencias internacionales". Desde el laborismo inglés a la socialdemocracia alemana, pasando por el sindicalismo francés, católicos y socialistas incluídos, existe el potencial democrático. Ellos son además los interlocutores a los que el PCI debe en verdad dirigirse, y no a los grupúsculos comunistas belgas, holandeses, escandinavos o ingleses que carecen de valor representativo democrático y popular en esos países. Hay aquí dos elementos básicos para una meditación seria y un nuevo punto de partida que pueden, a mi juicio, empezar por proponer..."
Este artículo provoca vivas reacciones en el seno del Partido Radical. En efecto, es la primera vez que se marcan distancias con la línea de la clase dirigente de "Il Mondo". Este artículo suscita un debate en el seno de la izquierda (del que son ejemplos las reacciones del socialdemócrata SARAGAT y del republicano Ugo LAMALFA), que se cerró bruscamente por la réplica a PANNELLA de Palmiro TOGLIATTI. Este se limita a justificar la conducta de los comunistas en el poder en las "democracias populares", así como la eliminación -no meramente política- de los aliados por causa de su emancipación respecto al programa inicial. Palmiro TOGLIATTI niega la necesidad de un debate sobre este tema y se limita a proponer que se confronten las posturas sobre el terreno de un programa positivo de progreso democrático y de renovación económica y que se elabore, aunque sea sólo a grandes rasgos, una orientación política nueva. Una vez hecho esto, sería preciso para alcanzar objetivos comunes, unir las fuerzas que haya sobre el tablero, en particular las fuerzas que presenten más peso, como la nuestra (AP 326) (AP 327)
1 de Marzo 59 - Moción aprobada en el primer congreso nacional del Partido Radical
"En el primer congeso nacional del Partido Radical, celebrado en Roma el 27 y 28 de Febrero y 1º de marzo de 1959, se ha aprobado el informe presntado por Arrigo Olivetti, del comité ejecutivo nacional, sobre la actividad del partido desde el el 10 de Diciembre de 1955, fecha de la fundación del partido, hasta esa fecha.
Durante esos tres años, el Partido tuvo que afrontar, en condiciones extremadamente difíciles dos confrontaciones electorales, una regional y otra general. En esas circunstancias, y como ya lo había experimentado en el mismo período, el partido mantuvo sin flaquear la confrontación frente a formaciones políticas más aguerridas y potentes.
Se aprecia claramente que los radicales tuvieron que afrontar virulentos ataques tanto de los clericales como de los comunistas, que deseaban unos y otros impedir el nacimiento de una izquierda democrática en Italia.
El Congreso entiende que el conjunto de los miembros del partido, en todos los niveles, tanto los órganos de dirección como las bases, han cumplido con su deber a pesar de los sacrificios y dificultades materiales y morales.
El Congreso, tras examinar la situación política emanada de las elecciones del 58, considera que la experiencia FANFANI intenta inaugurar una línea de reformismo de tipo paternalista, y que no puede resolver los problemas reales de paro, de desequilibrio entre Norte y Sur, de privilegios feudales, de ingerencia de la Iglesia y de falta de preparación en el plano técnico que impiden la adaptación de Italia a la civilización occidental y traban su desarrollo civil y económico.
Esta experiencia fue juzgada inoportuna por la Democracia Cristiana y las corrientes clericales y conservadoras, que con todo la apoyaron, en razón de que no podía dar solución a los problemas existentes. Esos partidos apoyaron sin reservas entonces a la extrema derecha, capitaneada por la Acción Católica y la derecha económica.
Desde su fundación, el Partido Radical estimó que sólo una alianza de la izquierda democrática, que comprendiese el conjunto de las fuerzas democráticas laicas y socialistas y respetase sus diferencias ideológicas y su autonomía de gestión, podía constituir una alternativa válida ara el país. Por otra parte, el Partido Radical constata que su acción política y sus llamamientos han obtenido resultados concretos. Las pruebas más reconfortantes de ello son la salida de los republicanos de la antigua mayoría centrista, la autonomía obtenida por el Partido Socialista, y la liberación de los social-demócratas más activos de las ambigüedades impuestas por el apoyo al gobierno.
En aquel momento, aunque confrontados con adversarios cada vez más aguerridos, el país disponía de un conjunto de partidos políticos cercanos a la izquierda democrática, capaces de llevar una lucha sin cuartel en favor de la autonomía del Estado, del desarrollo económico y de la elevación intelectual y moral de los italianos.
El congreso del Partido Radical entendió haber contribuido ampliamente a la creación de la izquierda democrática italiana e invitó a los órganos directivos centrales, a los periféricos, a los militantes y simpatizantes, a proseguir por esa vía con el objetivo de consolidar y ampliar tal coalición de forma que pueda ofrecer a los electores una perspectiva coherente y una alternativa eficaz.
En el seno de esta coalición, el Partido Radical debe actuar con miras a mantener e incluso cultivar, su identidad política y su programa, en el sentido en que están definidos en el informe BONESCHI aprobado por el congreso.
El Partido, en concreto, propone:
- una política de autonomía del poder civil en relación con el eclesiático;
- la denuncia constante y sistemática de la corrrupción pública y de los abusos de los aledaños del poder;
- una política económica de pleno empleo y de lucha contra las concentraciones monopolistas;
- la nacionalización de la industria eléctrica y de la energía nuclear;
- el desarrollo de la escuela pública para sacarlade su marasmo;
- un control eficaz de la radio y la televisión
- una política exterior de fidelidad a las alianzas occidentales en el respeto de la paz y de rechazo de los extremismos peligrosos; la adhesión a las instituciones comunes europeas en la medida en que éstas no sirvan a las clases privilegiadas en detrimento de la masa de trabajadores y consumidores.
Con este programa y estos objetivos, el congreso llama a todos los inscritos para que aprieten filas alrededor del partido y contribuyan a preparar al país a vivir días mejores, en la justicia y la libertad.
Organos electos:
Secretarios: Leopoldo PICCARDI, Arrigo OLIVETTI, Franco LIBONATI
Vicesecretario: Eugenio SCALFARI